Tenerife es una isla singular que resulta perfecta para hacer excursiones de todo tipo. Esconde muchos rincones llenos de curiosidades y paisajes naturales increíbles que te encantará conocer.
Pero hay un lugar en toda la isla que destaca por muchas razones que podrás comprobar con tus propios ojos cuando lo visites.
No hay duda de que el rey de la isla es El Teide, ubicado en un Parque Nacional donde cada milímetro del paisaje te sorprenderá desde la piedra más pequeña, hasta el pico más alto del volcán.
Podrás contemplar el resultado de las erupciones volcánicas más recientes e incluso descubrir cómo se formaron nuestras Islas Canarias.
Si eres amante del senderismo, hay unos caminos que puedes recorrer a pie hasta llegar a la estación superior del Teleférico. Allí podrás observar la mejor panorámica que ofrece el mayor parque nacional de las islas, con vistas del norte y del sur de Tenerife.
Si vas al Mirador de La Rambleta verás las Siete Cañadas y el Valle de Ucanca.
También podrás recrearte mirando los Roques de García, Roque Cinchado o Los Azulejos; esta última llama especialmente la atención por su color azul verdoso que se debe a la alteración química de sus rocas.
¡Desde cualquier punto del Teide los atardeceres son espectaculares! De madrugada el cielo se convierte en un baile majestuoso de estrellas fugaces, planetas y constelaciones que podrás apreciar con total claridad.
¿Sabías que Canarias es uno de los tres mejores lugares en todo el planeta para observar el cielo?
El Observatorio del Teide es el mayor observatorio solar del mundo entero y está ubicado a nada menos que 2.390 metros de altitud.
Todas estas opciones convierten a tu excursión al Teide en la ocasión perfecta para compartir en pareja, en grupo o en familia.
Es un paseo diferente donde vivirás experiencias increíbles y harás descubrimientos muy interesantes.